El invierno ya está aquí, y con él, bajan las temperaturas, los días son más cortos y el cuerpo empieza a notarlo. En diciembre, muchas personas en Logroño experimentan dolores articulares, rigidez muscular y un incremento de molestias físicas relacionadas con el frío.
Durante el mes de noviembre, el Ayuntamiento activó el Plan de Nevadas 2025–2026, con el objetivo de garantizar la seguridad de los ciudadanos frente a las bajas temperaturas y las posibles precipitaciones. Este plan incluyó medidas de prevención, limpieza y asistencia, enfocadas especialmente en las personas mayores y en zonas de mayor tránsito.
Sin embargo, más allá de los efectos visibles de la nieve o el hielo en la ciudad, el frío también tiene un impacto directo en la salud musculoesquelética. Desde la fisioterapia, diciembre es un mes clave para la prevención de lesiones, ya que se observa un aumento significativo de consultas por contracturas, lumbalgias, caídas y exacerbación de dolencias crónicas como artrosis o artritis.
¿Cómo afecta el frío a nuestros músculos y articulaciones?
El cuerpo humano reacciona al frío de varias formas, y muchas de ellas tienen consecuencias sobre nuestro sistema musculoesquelético:
- La circulación sanguínea disminuye en las extremidades, lo que hace que los músculos se enfríen más rápido y tengan menos oxígeno disponible.
- Esto provoca mayor rigidez articular y sensación de tirantez, sobre todo al despertar o tras periodos de inactividad.
- El cuerpo tiende a encogerse: elevamos los hombros, caminamos con tensión, apretamos la mandíbula. Todo esto favorece contracturas cervicales y dorsales.
- Las estructuras inflamadas, como tendones o articulaciones con artrosis, se sensibilizan con el frío, aumentando el dolor.
Además, muchas personas reducen su actividad física durante el invierno, lo que agrava el problema: al moverse menos y con peor movilidad, los músculos pierden tono, y las articulaciones se vuelven más propensas a la sobrecarga cuando sí se usan.
Lesiones más frecuentes en Logroño durante el invierno
En clínicas de fisioterapia como la nuestra, es común ver un aumento de casos en esta época relacionados con:
- Contracturas cervicales y lumbares: por posturas defensivas ante el frío, tensión emocional y falta de movilidad.
- Caídas en la vía pública: especialmente en personas mayores, como consecuencia de suelos resbaladizos, poca visibilidad y calzado inadecuado.
- Exacerbación de artritis y artrosis: las bajas temperaturas aumentan el dolor y la rigidez en articulaciones como rodillas, caderas, dedos y columna.
- Lesiones en corredores y ciclistas: quienes siguen entrenando al aire libre sin un buen calentamiento tienen mayor riesgo de tirones musculares, tendinitis y sobrecargas articulares.
- Ciáticas o molestias en glúteos y espalda baja: por permanecer mucho tiempo sentados con frío o por movimientos bruscos en superficies heladas.
Consejos para prevenir lesiones durante el invierno
Aunque el invierno presenta más desafíos físicos, con algunos ajustes y buenos hábitos es posible mantenerse activo sin sufrir molestias:
1. Calienta antes de salir de casa
Incluso si solo vas a caminar al trabajo o hacer recados, es recomendable movilizar las articulaciones antes de salir: giros de hombros, tobillos, caderas, flexiones suaves de rodilla y activación de core te preparan para el impacto del frío.
2. Utiliza ropa térmica y técnica
Abrigar bien la zona lumbar, cervical y las extremidades ayuda a mantener la temperatura muscular. Evita ropa que limite el movimiento o que deje pasar el viento. En los pies, calcetines térmicos y calzado antideslizante son fundamentales para evitar caídas.
3. No interrumpas tu actividad física
Si durante el resto del año caminas, haces ejercicio o vas al gimnasio, no lo abandones por el frío. Adaptar tu rutina (menos tiempo, espacios cerrados, ropa adecuada) es mejor que parar totalmente. La inactividad empeora la rigidez y el dolor articular.
4. Haz estiramientos suaves cada día
Dedicar 10 minutos al día a estirar cuello, hombros, espalda y piernas mantiene la movilidad y reduce el riesgo de lesiones al realizar gestos cotidianos.
5. Mantente hidratado
Aunque en invierno sentimos menos sed, el cuerpo sigue necesitando agua para mantener los tejidos lubricados y la musculatura en buen estado.
¿Qué hacer si ya tienes molestias?
Si en estos días de frío notas que te levantas con el cuello rígido, que tu espalda está más tensa o que tienes más dolor en las rodillas, es importante no normalizarlo. El cuerpo te está avisando de que necesita atención.
Una valoración fisioterapéutica puede ayudarte a:
- Identificar si el dolor es postural, inflamatorio o tensional.
- Aplicar tratamientos como terapia manual, calor profundo, estiramientos asistidos o ejercicios de movilidad.
- Prevenir que la molestia avance y se convierta en una lesión mayor o una recaída crónica.
- Diseñar una rutina de ejercicios adaptados a tus necesidades y a tu nivel de actividad.
El frío no debe detenerte, pero sí invitarte a cuidarte
El invierno en Logroño es una época preciosa para pasear por el Ebro, recorrer el centro o seguir entrenando al aire libre. Pero también es el momento del año donde más fácilmente aparecen lesiones por frío o recaídas articulares. Preparar tu cuerpo y escuchar sus señales es la mejor forma de prevenir molestias y disfrutar de la temporada sin interrupciones.
Si con la llegada del frío sientes más rigidez, tensión o dolor en músculos o articulaciones, en Fisioclinics Logroño te ayudamos con tratamientos personalizados para mantener tu movilidad y bienestar durante el invierno. Nuestro equipo está preparado para acompañarte en esta época con terapias adaptadas a tus necesidades, ya seas deportista, persona mayor o simplemente alguien que quiere moverse sin dolor.

















